El líder del extinto cartel de Guadalajara, Rafael Caro Quintero, se ha convertido en el fugitivo más buscado por la DEA, la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos. La agencia ofrece una recompensa de 20 millones de dólares por información que pueda llevar a su captura. En su ficha, la DEA añade la advertencia de que Caro Quintero, que tiene ahora 68 años, va armado y es peligroso. El narcotraficante está acusado del secuestro, tortura y asesinato del agente federal Enrique Kiki Camarena en 1985, además de homicidio, asociación criminal y distribución de marihuana y cocaína.
La agencia ofrece 20 millones de dólares de recompensa —cifra que ya lanzó en 2018 y es la más alta de la historia de la DEA— por el narcotraficante, que lleva desde 2013 en paradero desconocido después de haber sido liberado de prisión en un polémico fallo de los tribunales. El capo cumplía una pena de 40 años de cárcel por el homicidio de Camarena.
Referencias:
Commentaires